sábado, 23 de agosto de 2014

Yahari ore no seishun love come wa machiggateiru -cinicamente encantador-




Genero: Comedia y Drama
Episodios: 13
Impresión: Mucho mejor de lo que cree estar.


La traducción es «Mi comedia romantica adolescente está mal como era de esperarse» y es, increiblemente, una de las mejores series escolares  de recién compartiendo, por diferentes razones, el título con Hyouka; quizá simplemente gravito hacia el cinismo en este tipo de series sea por su contraste con lo que usualmente se espera ver (y que a mi me causa diabetes), porque siento que describen mejor la realidad o simplemente me gustan más pero Lovecome (asi me referiré a él a partir de ahora, aunque la abreviación oficial es Love comedy: SNAFU; acronimo de Situation Normal: All fucked up en ambito militar) definitivamente me atrapó desde el primer episodio.

Hikigaya Hachiman es un hombre falto de cualquier clase de motivación, obligado a unirse a un club de asistencia a la comunidad para que haga algo y cambie su ruta; ese club lo comparte con Yukino, una chica aparentemente perfecta pero con una personalidad terrible y con Yui, una chica alegre que sirve de contrapeso al par de cínicos que no logran llevarse bien. Su objetivo es resolver problemas, por extraño que suene, pero las relaciones entre ellos los llevarán a cambiar ellos mismos y cambiar a lo que los rodea.

Bajo esa premisa sonará como cualquier comedia romantica pero el primer capítulo se encarga acidamente de destruir esa posibilidad y poco a poco nos vamos metiendo en la mente de Hachiman, uno de los cínicos más creibles del anime por fuerza de presentar tantas caracteristicas negativas que te sorprenderías, en ocasiones, que es el protagonita sin dejarlo caer en la apatía del público siendo que realmente resuelve y mejora la calidad de vida de las personas a costa de la poca reputación que le queda.

 Yukino y Yui también exponen, en primer lugar, sus defectos por encima de sus virtudes demostrando por qué están ahí y dando una visión más completa de la vida escolar, una que va más allá de la visión rosa (citando a Kyon y a Oreki), producto de la nostalgia del escritor, para presentar una experiencia más neutral, cercana a lo que realmente significaba ser un estudiante.

Es profunda sin ser pretenciosa en lo absoluto, los dialogos son magníficos (sobre todo el fuero interno del protagonista) y el humor de primer nivel pero como no todo puede ser color de rosa pasaré a mencionar los puntos en los que estoy inconforme o, más bien (siendo que me dejo increiblemente satisfecho),  haré una ligera comparación con hyouka para develar sus diferencias y poder permitir al lector de este blog elegir por cual decantarse:

Mientras que hyouka presenta una experiencia relativamente más realista, teniendo misterios relativamente simples y presentando a Oreki como un prodigio desmotivado Lovecome no pretende no ser un anime y se regocija de las tendencias en él, teniendo un arte visual y auditivo más genérico además de obviar la vida escolar que hyouka puso tanto empeño en descubrir, centrandose en las partes clave de la trama y dando saliencia a los protagonistas en todo momento con crisis mucho más dramáticas.

Para el espectador que desea entrar más agilmente en el meollo del asunto lovecome será una experiencia más satisfactora que Hyouka pero si lo que deseas es un ambiente relajado y mayor enfasis en el realismo sin dejar de lado el cinismo sobre la vida estudiantil entonces lo inverso será cierto pero algo en lo que no puedo ser ambivalente, como ya dije, es el arte en el que el estilo propio (ligeramente k-onificado) de Hyouka sale muy por encima.

En fin, ambas series son grandes alternativas a series escolares que recomiendo ampliamente.

Calificación: 4/5
Muy recomendable.

No hay comentarios: