Episodios: 25
Género: Acción
Impresión: Tomo lo que prometió Zetman y lo cumplió con creces.
En el universo de Fate, se sostiene una guerra entre magos que invocan a un sirviente, un personaje de leyenda, para que les ayude a derrotar a los demás y así consigan que su deseo sea cumplido por el santo grial.
¿Suena como cualquier arco argumental de torneo en cualquier shonen? Claro que lo hace y su magia es precisamente eso. Toma todo lo que compone un shonen y lo retuerce hasta convertirlo en algo horrible e irreconocible pero de una manera sutíl.
Mientras que Zetman (ya hablaré de esa serie más tarde) destaca como serie para adultos por la violencia y el melodrama que involucran los actos heróicos, Fate/Zero brilla como una serie adulta con el mismo objetivo (destrozar convenciones del shonen) por su profesionalismo. Aquí los personajes actúan de manera acorde a los eventos y a su caracterización tomando en cuenta el tipo de mundo en el que fueron escritos, eso los hace respirar cinismo puro y eso permite que su presentación sea bastante controlada.
Ese control, la compostura de los personajes, es un arma de doble filo para esta serie ya que por una parte nos evitaremos melodramas y sujetos llorando cada 5 segundos pero por otra parte se debe leer mucho entre lineas y poner atención absoluta (como si leyeras un libro) para poder descifrar el estado emocional de los personajes.
Otra cosa que hace de manera correcta es el plantear varias ideologías y contrastarlas una y otra vez sin decirnos nunca, dejando a nuestro propio juicio, cual sería "la mejor" para poder lograr el objetivo. Las creencias de los personajes hacen de los combates una batalla contra si mismos además de contra sus oponentes.
Visualmente es impactante, musicalmente es bastante buena pero esperaba mejor de esa compositora.
Si eres nuevo a la saga, no tendrás muchos problemas y si eres viejo conocido la amarás, aún si sabes el resultado de toda esta precuela.
La escribió Gen Urobachi. Eso debe asegurar el tipo de final que tendrá. No decepciona para nada.
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