Género: Comedia, Romance, Drama
Capítulos: 12 (y se viene una segunda temporada)
Impresión: Lo usual del buen material de KyoAni
Primero la sinopsis: Yuuta, el sujeto al que seguiremos en esta ocasión, solía ser un Chuuninbyou, cuya traducción sería síndrome del octavo grado y significa el conservar la imaginación de niño (y los delirios de grandeza que usualmente conlleva) o tener una regresión a esa etapa durante un estadio más maduro en el crecimiento de los jóvenes (De ahí el título de la serie, cuya traducción más cercana sería «A pesar de ser un adolescente delirante, deseo amor»). Él decidió madurar y dejar atrás todas sus fantasías con el fin de pasar un rato normal (y dejar de ser marginado) en la secundaria pero los recuerdos de su pasado lo hacen repetir, por última vez, su lema como el malvado mago «Dark Flame Master»; desgraciadamente, para él, su vecina del piso de arriba (llamada Rikka) lo descubrió y ahora lo sigue preguntándose por qué dejo de delirar y lo molesta pues ella también es una chuuninbyou además de que la hermana de esta chica, harta de su comportamiento infantil, busca como curarla de raíz sin pensar en las razones por las que podría estar así.
¿Qué podemos decir de este anime? Es visualmente atractivo con diseños realizados específicamente para ser lo más moe posible (típico de KyoAni) y con un VA con un fin similar que milagrosamente no se convierte en molestia por la agudeza de las voces (Cosa igual, común para KyoAni, a diferencia de los shows moe de JCstaff). La verdad de esta compañía no me gusta entrar mucho en detalles técnicos pues usualmente tienden a ser muy buenos en ese apartado y es la sustancia lo que suele faltar (tamako market, por ejemplo).
Dejando de lado el apartado técnico y partiendo hacia lo que yo prefiero, que son todos esos pequeños detalles en la dirección y los diálogos que dan vida a la serie, debo decir que también es bastante sólida aunque la primera impresión no sea la mejor de lo que podría dar, fingiendo ser una comedia genérica y no revelando su valía hasta ya avanzada la serie.
La temática puede reducirse, en cierto sentido, a la fantasía contar la realidad y cada capítulo nos dan, durante unos segundos, la visión de los personajes de cosas comunes, imaginadas como proezas épicas que requirieron poderosos encantamientos oscuros pero va un poco más allá de lo obvio y conforme el drama comienza a apoderarse de la trama los colores cambian de la paleta brillante y cálida a colores más fríos y apagados.
Los personajes principales (al menos la mayoría), aunque al inicio parecen copias de otras series, retoman con lados ocultos y resaltan tanto en la comedia como en el drama con un carisma inusual para este tipo de serie.
Los diálogos son bastante regulares, apoyándose más de lo visual pero tienen muchisimos guiños hacía los videojuegos y otras series, cosa que es un plus para aquellos que sepan de tales cosas y puedan detectar las referencias además de burlarse un poco de ciertas tendencias del anime moderno, exagerándolas o parodiándolas abiertamente.
La trama es una visión interesante al síndrome y resalta preguntas, no necesariamente dirigidas a ese síndrome si no a la manera en que se pierde la inocencia de la infancia y el significado de las fantasías o delirios pero a la vez, mantiene las preguntas a raya para hacer una serie divertida y nada más.
Yo diría que es recomendable como una especie de botana, no llega a ninguna altura pero tampoco vuela bajo, para ser honestos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario